Las mejores técnicas de injerto capilar

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El injerto capilar es la única metodología que permite recuperar el pelo ya perdido. Son miles de personas las que padecen alopecia, y aunque existen múltiples tratamientos preventivos que resultan muy eficaces ninguno de ellos es capaz de restaurar el cabello, por lo que solo sirven a modo de precaución. La técnica del trasplante capilar ha adquirido una gran popularidad en los últimos años, debido principalmente a los avances médicos y tecnológicos que han tenido lugar en esta área de la medicina estética. Actualmente contamos con recursos seguros e indoloros que facilitan la intervención quirúrgica y garantizan unos resultados satisfactorios, motivo por el cual son muchos los pacientes que optan por este tratamiento.
Dependiendo de los diferentes grados de alopecia que pueda presentar el paciente, el cirujano podrá recomendar una técnica de injerto u otra, en tanto que existen diversos métodos. En este artículo vamos a hacer un análisis de las mejores técnicas de injerto capilar que se realizan en la actualidad, ya que hay determinados procedimientos que ya no se llevan a cabo, como la técnica FUT, consistente en la extracción e implantación de una tira de pelo completa. El injerto capilar actual se realiza mediante la implementación de unidades foliculares individuales, y hay distintas maneras de proceder.
Técnicas de trasplante capilar actuales
Las técnicas de trasplante capilar actuales de consisten en la extracción de folículos pilosos de las zonas donantes del cuero cabelludo, o del cuerpo o barba dependiendo de la densidad de que disponga el paciente, y en su posterior introducción en las áreas receptoras o alopécicas. La efectividad de este tratamiento está altamente testada y los resultados, si bien tardan en ser visibles, están garantizados. Entre los diferentes métodos que se llevan a cabo destacamos los siguientes:
Técnica FUE
La técnica FUE es la técnica que más se realiza en la actualidad. Por norma general es el proceso al que se someten la gran mayoría de pacientes independientemente de su densidad, ya que los resultados que se han obtenido mediante este procedimiento siempre son satisfactorios. Es por este motivo por el cual se considera la técnica FUE como la mejor técnica de injerto capilar, y es también este el motivo por el cual todas las clínicas especializadas en trasplante de pelo ofrecen esta técnica como la principal y más recomendable.
Consiste en anestesiar el cuero cabelludo del paciente para conseguir que todo el procedimiento sea indoloro. No es necesario dormir al paciente por completo, puesto que solo hará falta que tanto la zona donante como la receptora estén anestesiadas. A continuación, se extraerán con delicadeza las unidades foliculares, unidades en las que se encuentran entre 3 y 4 folículos, y se tratarán en una solución . Esta solución de plasma rico en plaquetas sirve para preparar a los folículos para su posterior inserción, en tanto que les permite seguir recibiendo nutrientes, aunque se encuentren fuera del cuerpo.
A continuación, el cirujano creará micro incisiones en la zona receptora ayudándose de unas cuchillas de acero, abriendo así los micro canales en los que injertará los folículos. Estos folículos cuentan con las características genéticas de la zona donante, por lo que no se desprenderán ya que esta zona no está predispuesta a la caída.
Se trata de una técnica mínimamente invasiva y cuyo proceso de recuperación es tanto rápido como indoloro. Esta intervención no deja cicatriz, y los resultados se pueden comenzar a notar a partir del tercer mes, cuando los folículos injertados comienzan a desprenderse debido a que el incipiente crecimiento del pelo nuevo.
Técnica FUE Zafiro
Más que una técnica aparte, la técnica FUE Zafiro se considera una variable de la técnica FUE que hemos expuesto previamente. La diferencia principal radica en que, en lugar de utilizar las cuchillas de acero para crear las micro incisiones, en la técnica FUE Zafiro se emplean hojas de zafiro. Estas herramientas son mucho más finas y afiladas, por lo que permite crear una incisión más precisa y pequeña. No solo se considera una variación sino también un avance que permite obtener unos resultados mejores, en tanto que no es necesario dañar tanto el cuero cabelludo para injertar los folículos extraídos.
Hay quien duda a la hora de decidir cuál es la mejor técnica de injerto capilar debido, entre otras cosas y principalmente, a que la técnica FUE Zafiro permite una mayor precisión siguiendo la misma metodología que la técnica FUE tradicional. No obstante, esta última es la que se lleva a cabo con mayor asiduidad, puesto que las hojas de zafiro son una herramienta que incrementa el precio de la intervención, y la satisfacción de los resultados está igualmente garantizada.
Técnica DHI
La técnica DHI consiste en la misma extracción e introducción de las unidades foliculares, pero esta sí es una metodología nueva que solo es aplicable a determinados pacientes y que sigue un procedimiento que, aunque en esencia es idéntico, cuenta con marcadas diferencias.
En tanto que la técnica FUE extrae los folículos y los trata antes de introducirlos en el área receptora, en la técnica DHI se emplean lo que se conocen como agujas implementadoras o agujas choi. Estas agujas se caracterizan por tener una punta hueca en la que se introduce el folículo extraído, de modo que se extrae y se introduce de manera inmediata y sin tratar la unidad antes de su injerto.
Las ventajas de la técnica DHI son notorias, ya que el folículo pasa mucho menos tiempo fuera del cuerpo y su asentamiento en la nueva zona resulta más rápido y sencillo. Se trata de un tipo de trasplante capilar en el que es preciso contar con una destreza exquisita, de ahí que no todas las clínicas sean capaces de ofrecer esta opción. No obstante, esta técnica solo se recomienda para aquellos pacientes que cuenten con un nivel de alopecia bajo, puesto que no es efectiva en pacientes con niveles elevados o mayores de 40 años. Es especialmente práctica para aumentar la densidad del cabello, y no es necesario rasurar la zona donante o receptora para poder llevar a cabo la intervención.